7.9.06

de Kampush, montoneros, piedras, papeles, tijeras...¡uh!

El lunes 7 de septiembre 1970, en plena dictadura militar, a las 20:00 horas, a quince años del golpe que derrocara al gobierno de Perón y proscribiera ininterrumpidamente la expresión política de la mayoría del pueblo argentino y a escasos 4 meses del secuestro y muerte del militar golpista y fusilador Pedro Eugenio Aramburu por parte de una naciente organización llamada Montoneros, varios de sus dirigentes tenían una cita acordada en el bar La Rueda, cercano a la estación del ferrocarril de la localidad de William Morris.
Fernando Abal Medina y Carlos Gustavo Ramus -buscados por la responsabilidad en el hecho recién mencionado y fundadores de la organización- llegaron unos minutos antes de lo acordado.
En ese momento, una comitiva policial ingresó sorpresivamente al local. Ante el desconcierto de los presentes, Abal Medina y Ramus tomaron sus armas y comenzaron a disparar.
Alcanzados ambos por las balas policiales, Carlos murió en el acto, mientras Fernando lograba sacar de entre sus ropas una granada que explotó en sus manos. También falleció en ese instante.
El tiroteo había durado unos 20 minutos.
Desde ese día el 7 de septiembre fue declarado el "día del montonero".
Para recordar las luchas que el pueblo argentino ha llevado a cabo para su liberación, hablamos con Susana Ramus, hermana menor de Carlos. Susana es socióloga, fue militante de Montoneros y es sobreviviente del centro clandestino de detención de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), donde estuvo secuestrada desde enero de 1977 a enero de 1979 y nos narró su dolorosa percepción familiar y militante de aquellos hechos, sosteniendo que, aun vistos los resultados al día de hoy de aquellas acciones, si tuviera la oportunidad de aconsejar a su hermano sobre qué hacer, no le propondría que cambiase ninguna actitud.


En otro orden de cosas, nos enteramos de que a Natascha Kampush la reclusión de 8 años en un sótano parece haberle hecho más bien que mal. la chica (aparte de ser extremadamente bonita para ser austríaca -es decir: de estar tan, pero tan lejos de las fauces del los argentinos pero mal-)demuestra una sensatez y una templanza de ánimo que más quisiéramos en George Bush, Carlos Ménem o Nazarena Vélez.

También nos anoticiamos (planeta generoso, si los hay) de la existencia de una máxima autoridad en el riesgoso y estrastégico deporte conocido en la Argentina como "Piedra, Papel o Tijera" -existencia ciertamente milenaria, según ciertos testimonios- , y es la World Rock Paper Scissors Society (Sociedad Mundial de Piedra, Papel o Tijera) con sede en Toronto (Canadá) y oficinas en varios países, entre ellos Estados Unidos. Los orígenes del juego y sus distintas versiones en el planeta son oscuros incluso para la Sociedad, que en clave de humor afirma que los primeros jugadores deben haber sido los homo sapiens en sus intentos por resolver disputas por comida y apareamiento.
Sin embargo, Graham Walker, fundador de la Sociedad, señala, en un tono algo mas serio, que el registro escrito más antiguo data del 200 antes de Cristo y procede de Japón, donde el juego se conoce como 'Jan-Ken', al igual que en Perú y Brasil.
El juego emigraría a Europa a mediados del siglo XVIII, donde por alguna razón misteriosa se asocia a Jean Baptiste Donatien de Vimeur, Conde de Rochambeau, un general francés que apoyó a George Washington durante la Revolución Americana.
Otras teorías atribuyen el origen del juego a Africa y Europa; de lo que no cabe ninguna duda es sobre su universalidad.
En Indonesia existe una versión conocida como 'Jan-Ken', mientras que en Chile se llama 'Cachipún' y en Corea del Sur 'Mook-Chi-Pa'.
Algunos han atribuido simbolismos abstractos -de carácter psicológico- a la piedra (poder, fortaleza, agresión), al papel (pasividad, cautela y sabiduría, también dinero) y a las tijeras (la perversión, el mal y la tecnología).
Y no falta quien va más lejos y considera que el 'piedra, papel o tijera' es 'el Padre de todas las Artes Marciales', que habrían nacido de la disputa surgida entre un grupo de jugadores de Oriente. Según esa versión, los contrincantes se habrían liado con los puños al no coincidir sobre el resultado que les deparó el juego.
Que lo parió... ¿no?